Con el objetivo de disminuir todo tipo de presiones y stress en el conductor, Ford Motor Company ha introducido en el mercado el cinturón inflable con airbag para dos de sus asientos traseros, pensado especialmente para aumentar la seguridad de los menores de edad que generalmente son quienes viajan en esta posición dentro del auto.
Entre los beneficios de esta nueva tecnología, -que ya se encuentra disponible en el modelo Explorer Limited- se encuentra su diseño pensado para reducir las lesiones de cabeza, cuello y pecho, siendo adaptable también a sillas de niños y guaguas. Además son suaves y acolchados, similares a los tradicionales e incluso más cómodos.
El factor de confort también podría ayudar a mejorar la tasa de uso de cinturón de seguridad en los pasajeros traseros. De hecho, el uso de cinturón en Estados Unidos es de 61%, comparada con 82% para los pasajeros delanteros, según datos de la NHTSA.
Este sistema funciona gracias a sensores que determinan la severidad de la colisión frontal o lateral y en caso de accidente, un gas comprimido en frío infla el airbag sobre el torso. La reacción automática de los cinturones inflables, permiten que se distribuya la energía de la fuerza del choque en el torso del ocupante hasta cinco veces de mejor manera que un cinturón tradicional. Después del despliegue, el cinturón permanece inflado por algunos segundos después de dispersar el aire a través de los poros de la bolsa de aire.
En sus pocos meses de vida, el revolucionario sistema, ya ha cosechado premios y elogios en Estados Unidos, y que de hecho se hizo acreedor recientemente del Breakthrough Product Award, reconominiento entregado por la legendaria revista Popular Mechanics.
“La llegada de estas tecnologías es una muestra más de la importancia que la seguridad representa para Ford Motor Company. Así apostamos por este tipo de tecnologías para dar los siguientes pasos en materia de seguridad tanto en el mundo como en el mercado chileno.” aseguró el Gerente General de la compañía en Chile, Pablo Haase.