Pocos meses después de su estreno mundial, BMW lanza en Chile la séptima generación de Serie 5, un modelo emblemático para la marca, con 45 años de historia y casi 8 millones de unidades vendidas en todo el mundo desde su estreno en 1972.
Signado con el código G30, el nuevo Serie 5 fue concebido bajo el concepto de diseño ligero (Efficient Lightweight), utilizando una nueva plataforma construida con materiales más rígidos pero livianos (magnesio, aluminio y acero), rebajando hasta 100 kilos respecto de la anterior generación, pese a mantener medidas similares a la de su antecesor.
El BMW Serie 5 2017 mide 4.936 mm de largo, 1.868 mm de ancho, 1.479 mm de alto y tiene entre ejes 2.975 mm. Así, es 29 mm más largo, 8 mm más ancho y 15 mm más alto que el Serie 5 F10 al que reemplaza, con 7 mm más entre ejes.
Respecto de su competencia, es casi idéntico en tamaño a un Audi A6, con un par de milímetros más de largo y otro par menos de ancho. Sí hay diferencia en la distancia entre los ejes, con 63 mm de ventaja para los de Munich. A la Clase E de Mercedes-Benz, lanzada hace pocos meses atrás, le saca 13 mm de largo, 16 mm de ancho y 36 mm entre ejes.
El diseño de la Serie 5 replica muchas de las líneas generales vistas en la nueva Serie 7, incluyendo la parrilla frontal más ancha, una nueva nervadura lateral doble y un capó largo y marcado (puedes leer aquí la prueba de manejo a este modelo).
Destaca el trabajo aerodinámico para conseguir un coeficiente de 0.22 en el caso del 520d EfficientDynamics, que no llega a Chile, y de 0.24 para las otras versiones, mejor que el anterior modelo pero por debajo de la Clase E.
Algunos elementos replicados de la Serie 7 son el "Air Curtain", una persiana ubicada por detrás de la parrilla que abre o cierra dependiendo de la necesidad de refrigeración del motor, y el "Air Breather", salidas de aire ubicadas por detrás de las ruedas delanteras queb reducen la turbulencia y canalizan los flujos de aire.
El habitáculo también asume las líneas horizontales del Serie 7, ofreciendo el nuevo sistema iDrive, más intuitivo y tecnológico. Dependiendo de la versión, se incluye una pantalla táctil de 10,25 pulgadas, controles por voz y gestual, navegador GPS, un sistema de asistencias que la marca denomina "copiloto personal", control remoto de estacionamiento, y la ya famosa llave digital "Display Key".
Bajo el capó, la marca mantiene los nuevos motores modulares que se sumaron a la gama hace aproximadamente un año.
Por el lado de los gasolineros estarán el cuatro cilindros 2.0 litros con 252 Hp y 350 Nm de par que dará vida a la versión 530i ($36.000.000), y el seis cilindros 3.0 litros con 340 Hp y 450 Nm de par para el 540i ($50.000.000). Ambos bloques son de inyección directa, tienen un turbo de doble entrada y un sistema de distribución variable de doble fase.
Por el lado de los diésel también hay un cuatro cilindros 2.0 y un seis cilindros de tres litros. El 520d eroga 190 Hp y 400 Nm ($35.000.000), mientras que el 530d sube la potencia a 265 Hp y 620 Nm de par ($50.000.000).
Todos están asociados a una transmisión automática de ocho velocidades que envía el par al eje trasero.
En un futuro próximo se sumará como modelo de entrada el 520i, y una variante ecológica denominada 530e iPerformance, equipado con un motor gasolinero y otro eléctrico, para 252 Hp de potencia total y una autonomía eléctrica de 50 kilómetros.
Puedes leer nuestra impresión de manejo realizada durante el lanzamiento mundial en Portugal en este enlace.
BMW Serie 5 2017