Hoy en día podría resultar complicado el hacerse de un vehículo con propulsor eléctrico, y no es para menos, pues en todo mercado sabemos que las innovaciones tecnológicas llegan a precios muy altos, al menos en su periodo de introducción.
Es así como debido a diversos temas, como el aumento de la gasolina y otros de carácter ambiental, la demanda de los autos eléctricos ha incrementado, pero no lo suficiente, pues aún nos enfrentamos con diversos retos que poco a poco deben ser solucionados para que la oferta y demanda sea aún mayor.
BMW y Jaguar Land Rover, saben que una de las principales causas para que los usuarios no contemplen la compra de vehículos con propulsor electrificado es el alto costo de las opciones que presentan la mayoría de las marcas, y es por eso que han decidido sumar esfuerzos para desarrollar motores eléctricos de nueva generación, con la finalidad reducir los costos de investigación y producción para poder ofrecer una gama más completa de productos a precios mucho más accesibles.
De inicio, se pretende tener como base a la quinta generación de la tecnología eléctrica de BMW, es decir, la denominada Gen 5 que debutará el próximo año con la llegada del iX3, en donde se pretende dar seguimiento y continuidad para lograr una evolución significativa con ayuda de ingenieros de ambas compañías.
Esta colaboración dará inicio con la selección de un equipo de expertos que se situarán en Múnich, Alemania; ellos estarán a cargo del desarrollo y planificación para crear sinergia en términos de producción para que los motores puedan ser introducidos y compartidos en futuras versiones y modelos de cada firma.
“La colaboración es clave para el éxito. Con Jaguar Land Rover encontramos un socio cuyos requisitos para la futura generación de unidades de conducción eléctricas coinciden significativamente con los nuestros”, expresó Klaus Fröhlich, responsable de desarrollo de BMW en Alemania.
