El año 2017, Singer sorprendió al mundo tuerca con un finísimo restomod orientado al mundo de las carreras creado en conjunto con Williams. El modelo en sí, se llamó Dynamics & Lightweighting Study (DLS) puesto que se trataba principalmente de un estudio sobre como incorporar tecnologías del mundo de la competición actual a un modelo clásico, cosa de poder crear el restomod deportivo definitivo.
Y al DLS le fue increíble, pero el público demandaba más potencia, algo más enérgico. Así que se pusieron manos a la obra para crear una evolución del DLS, denominado DLS Turbo.
Singer DLS Turbo: el concepto
El DLS Turbo, versión calle.
A más potencia, más cuerpo. Este DLS Turbo rememora el estilo de los Porsche 934/5 de fines de los setenta. Y es una evolución lógica, puesto que tal como el DLS celebra la evolución de los 911 aspirados de la época, este modelo busca lo mismo con alimentación forzada y en los setenta, el Type 934/5 lo dominó todo en la categoría SCCA Trans-Am.
Rob Dickinson, el CEO y fundador de Singer recuerda: "Yo tenía 12 años cuando un amigo de mi papá nos mostró una cinta en Super 8 de las seis horas de Watkins Glen de 1977. Todavía recuerdo el shock de ver como el diseño de un Porsche 911 mutaba al de un auto con increíbles caderas cuadradas, prominentes entradas de aire y un enorme alerón de doble hoja; era el lado B del 911, el auto de carreras. Desde que Singer inició operaciones que he querido volver a ese momento, colaborar con nuestros clientes y celebrar ese auto, el 934/5."
El DLS Turbo, versión pista.
Para darle vida al DLS Turbo, se parte de un 911 de la generación 964, fabricados entre 1989 y 1994. El auto es desarmado hasta el último perno y la carrocería restante entra a un proceso de preparación, donde se limpia, se revisa, se restaura y se refuerza. Los paneles de fibra de carbono que serán instalados en el exterior fueron diseñados en base a un estudio digital de dinámicas de fluido (CFD), dando forma a las entradas de aire y los ductos NACA, pero respetando la silueta clásica de un 911. Luego vienen dos rutas; definir si el cliente quiere un auto para pista o para calle.
El auto para pista cuenta con un alerón posterior de alta carga aerodinámica y un frontal mucho más aerodinámico, incluyendo un splitter más amplio. El 911 de calle cuenta con un alerón trasero tipo "ducktail" y un frontal delantero que privilegia la eficiencia por sobre la carga aerodinámica. Si estás indeciso, no te preocupes ya que Singer pensó en que ambos extremos del auto fueran intercambiables.
El motor del Porsche donado también es la base del DLS Turbo. Este se desarma y se restaura con los mejores componentes. El resultado es un block de 3.8 litros y 24 válvulas con doble turbocargador, wastegates electrónicas, intercooler de aire a agua y un ventilador eléctrico. El resultado es de 700 Hp, los que alcanza a las 9.000 rpm, por medio de una caja de seis velocidades.
El resto viene por medio de frenos carbono cerámicos, calipers monoblock, neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2 o Cup 2R, llantas asimétricas de magnesio forjado con monoapernadura y por supuesto, todos los toques personales de cada dueño, con materiales y colores a elección.
Singer presentará al DLS Turbo entre el 13 y el 16 de julio en el Festival of Speed de Goodwood, o sea que lo veremos correr, lo que es bueno.