Pese a que se lanzan nuevas marcas y modelos eléctricos en todo el mundo, la tendencia a la baja en la compra de estos vehículos se ha sostenido en el tiempo y hasta aumentado en algunos mercados, motivo por el cual muchas marcas como Volkswagen, General Motors y hasta el gigantesco grupo Stellantis han debido cambiar sus estrategias de cara al 2030, y la más reciente que podría sumarse a estos cambios es Volvo.
El fabricante sueco no ha logrado cumplir con las metas autoimpuestas de su plan de electrificación, con una demanda a la baja en el campo de la electromovilidad, por lo que se ajustarán a lo mismo que está haciendo la competencia: apostar más por los vehículos híbridos.
Estos ajustes no caen muy bien al interior de la marca, ya que en marzo de este año finalizó la producción de sus legendarios motores diesel, reconocidos internacionalmente por su eficiencia y confiabilidad, a lo que se suma una serie de adecuaciones e inversiones para electrificar aún más la gama. Recordemos que Volvo, junto a BMW, tiene uno de los line-up más completos en cuanto a electrificación, con presencia en casi todos los segmentos de alta demanda respecto a lo que es una marca premium.
Por todo lo anterior, la marca se centraría en perfeccionar y producir más vehículos híbridos con la intención de mejorar su indice de ventas, a la vez que encuentran la manera de hacer más atractivos los autos eléctricos. El propio Jim Rowan, CEO de Volvo, fue quien dio la noticia: "Se informa que el futuro enfoque de investigación y desarrollo de Volvo se centrará en los vehículos híbridos enchufables, y sus modelos híbridos continuarán vendiéndose hasta 2030, lo que es contrario al plan Electric Pure que la marca había anunciado anteriormente".
Una de las medidas que Volvo estaría evaluando es la de mejorar su plataforma SPA1, actualmente utilizada en el XC60 y XC90, que admite la utilización de mecánicas híbridas. Otra de las opciones sería tomar la plataforma CMA - desarrollada junto con Geely -utilizada en modelos como el XC40 y el C40-, y que también soporta tanto mecánicas híbridas como eléctricas.
Finalmente, todos estos cambios ayudarían a que la marca no dependa únicamente del rotundo éxito de ventas que ha tenido el EX30, cuyo niveles de ventas van por las nubes.
Ante esta información, Volvo Chile quiere precisar que "el objetivo global de convertirnos en un fabricante de automóviles 100% eléctricos para el año 2030 sigue firme, así como nuestro compromiso de alcanzar la neutralidad de carbono en todos nuestros procesos logísticos y de producción para el 2040".
Volvo Chile, importada por Inchcape, indica que las declaraciones de Jim Rowan a un grupo de inversionistas "pudieron ser malinterpretadas. Este enfoque siempre ha sido parte de nuestra estrategia de electrificación, contemplando la venta de modelos híbridos hasta 2030".
Volvo aclara que "la estrategia global avanza positivamente en diversos mercados, especialmente en nuestra región, donde hemos visto una excelente aceptación de nuestras iniciativas de electrificación".
