
Durante la conferencia del pasado 4 de septiembre, la presidenta Claudia Sheinbaum mencionó que estaba considerando imponer aranceles a las importaciones de China y otros países asiáticos, como parte del Plan México. Esta semana, Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Economía -SE-, confirmó el aumento al 50% de aranceles a los autos importados desde dicho mercado.
Recordemos que los autos importados de China ya tienen aranceles del 20% y ahora, este impuesto subirá a 50%, que es el máximo permitido establecido por la Organización Mundial de Comercio (OMC).
De acuerdo con Ebrard, el aumento a las importaciones de autos chinos corresponde a que “los precios a los que están llegando a México están debajo de lo que nosotros llamamos precios de referencia”.
El arancel promedio actual es de 16,1% y pasará a 33,8% en al menos 20 sectores estratégicos, pero en el caso de los aranceles a las importaciones de China queda:
- Autos ligeros: de entre 15 y 20%, al 50%
- Repuestos: de entre -35% y 0%, a 10% y 50%
Además, este incremento tendrá un impacto de 52.000 millones de dólares en importaciones.
El gobierno de México pretende que los aumentos arancelarios sustituyan las importaciones de Asia por producción nacional, ya que no cuentan con tratados comerciales con este continente, específicamente con China, Corea del Sur, India, Indonesia, Rusia, Tailandia y Turquía.
Asimismo, el secretario de Economía, aseguró que la reforma para corregir desbalances comerciales en sectores claves fue enviada el martes 9 de este mes a la Cámara de Diputados para su aprobación.
En esta se propone modificar 1.463 fracciones arancelarias de las industrias automotor -autos y repuestos- textil, vestido, plástico, siderúrgico, electrodomésticos, aluminio, juguetes, muebles, calzado, marroquinería, papel y cartón, motocicletas, remolques y vidrio, con el fin de recaudar 3.760 millones de dólares extras para el presupuesto del 2026.
Esta situación no es exclusiva de México: muchos países que tienen producción local han optado por gravar las exportaciones chinas, debido a su bajo costo. Es una manera -cuestionable o no- de regular y proteger su economía. A veces, el mercado no se "regula solo".