Durante las últimas horas, el ministro del Medio Ambiente, Pablo Badenier, junto al intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, hicieron el anuncio oficial para el nuevo "Plan de Descontaminación Atmosférica de la Región Metropolitana" llamado Santiago Respira, tras su aprobación por el consejo de ministros de la sustentabilidad, iniciativa que persigue no tan solo disminuir las emisiones de material particulado en periodos más complejos, sino que también actualizar las normas vigentes con respecto a parámetros que incidan directamente en la contaminación, tales como artefactos y medios que produzcan contaminación y homologaciones.
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Los cambios que introduce este plan de descontaminación comienzan con la restricción vehicular, dictaminando un periodo fijo entre el 1ro de mayo y el 31 de agosto, donde todos los vehículos catalíticos hasta el 2012, tendrán restricción fija. Los vehículos post-2012 se homologan bajo la norma Euro 4 o superior (Euro 5 para los diésel), por ende, se encuentran liberados. Según lo estipulado, esto se resume en que cerca de un millón 780 mil vehículos tendrán cerca de 16 días donde no podrán circular. A esta ventana de restricción también estarán afectas las motocicletas inscritas en el periodo anterior a mayo del 2010. También se hará sanción a todo tipo de vehículo que durante su tránsito estén emitiendo humo visible por sus escapes, como puede ser el caso de vehículos diésel mal mantenidos.
Los vehículos pesados también tendrán una mayor fiscalización, donde los que superen los 12 años de antigüedad ya no podrán ingresar al anillo de Américo Vespucio. Con respecto a vehículos de transporte público y privado, todos deben homologarse bajo la norma Euro 6, a partir de los 24 meses posteriores a la puesta en marcha de este plan. Esta exigencia es inédita en la región, siendo el primer país de Latinoamérica en incorporarla.
Por otro lado, el nuevo plan sumará a estas medidas, la prohibición del uso de calefacción a leña en la provincia de Santiago, San Bernardo y Puente Alto. Gracias estas medidas, se estima una baja de un 60% en las emisiones contaminantes de la región, concentrándose en el material articulado fino, el más tóxico.
