Los frenos ABS y el control de estabilidad estan entre nosotros hace mucho tiempo. Y siendo sistemas probados, sencillos y efectivos en la mitigación de accidentes, cuesta creer que recien despues del 2020, recién serán obligatorios como elementos de seguridad en los autos que se comercialicen en nuestro pais.
Durante esta semana, se publicó en el diario oficial, la normativa que modifica el decreto N° 26 de 2000 del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, que obliga a que todos los vehículos livianos que sean vendidos en nuestro pais lleven frenos ABS desde el 2020 y control de estabilidad desde el 2021.
A nosotros, como especialistas, nos consta y siempre hemos abogado por la seguridad en nuestros tests y reviews. Creemos que hoy en día, la seguridad es algo que no se puede transar y que lamentablemente perjudica a una gran parte de la población, quienes solo pueden tener acceso a vehículos económicos, los cuales no siempre cuentan con todos los elementos de seguridad necesarios. Al no democratizar estos equipamientos, lo que se hace es seguir fomentando su consideración como elementos "de lujo" o "de confort", cuando la protección de los ocupantes es lo primero que debería estar en la lista de los fabricantes, sin importar el tamaño o el precio del auto. Se entiende que hace 40 años, probablemente estos desarrollos eran costosos, pero ya hace bastantes años que no lo son y ayudan notablemente a mejorar la estabilidad de un vehículo en velocidad, mejorando su capacidad de detención y maniobrabilidad en situaciones de riesgo.
Los frenos ABS
Los frenos ABS tienen más de 40 años de funcionamiento. Inicialmente se pensó como un elemento de seguridad para aviones y vehículos de transporte pesado, pero después de su introducción en vehículos de pasajeros y las mejoras en programación electrónica, hicieron que su uso se comenzara a extender de manera más masiva, teniendo como hito principal, el desarrollo de Bosch junto a Mercedes-Benz en el Clase S de 1978, siendo el primer auto de pasajeros en introducir el ABS electrónico.
El sistema de antibloqueo lo que hace es generar una cadencia de bombeo en los frenos, lo que permite que no se deslicen y finalmente frenen en menor tiempo de lo que lo harían sostenidamente. Esto también ayuda a liberar temperatura y roce. Se distingue en muchos autos por el bombeo del pedal y un sonido vibratorio a la hora de frenar a fondo en una situación compleja.
El control de estabilidad
El control de estabilidad, en cambio, es un poco más nuevo. Sus primeros desarrollos fueron obra de los japoneses, especialmente como un derivado del control de tracción. Esto se vio en modelos de Toyota, Mercedes-Benz y BMW de alta gama, durante los años '80. Después de un periodo de desarrollo, Mercedes-Benz junto a Bosch y BMW junto a Bosch y a Continental lanzaron sus propios sistemas de ESP en 1995 para el S600 Coupe y el Serie 7.
El ESP lo que hace es medir vía diversos sensores el ángulo de dirección y la inercia del auto. Entonces si el auto está realizando algún movimiento, pero no se está moviendo hacia ese lugar (porque está perdiendo tracción o está derrapando), este acciona los frenos de manera asimétrica para generar una fuerza que contrarreste el movimiento del auto y mantenga su control. Esto queda en evidencia con la famosa "prueba del alce" donde un auto debe esquivar un objetivo de manera brusca a velocidad urbana (sobre 50 km/h). El caso más polémico sobre el uso del ESP, se vivió en 1997, con el volcamiento de un Mercedes-Benz Clase A sin ESP en la famosa prueba, a una velocidad de casi 80 km/h. El revuelo fue tal, que Mercedes-Benz, para salvaguardar su honra como líder en seguridad, realizó un recall urgente de todas las unidades comercializadas sin ESP, para equiparlas sin costo alguno con el dispositivo.
La prueba más reciente sobre la efectividad del ESP fue realizada por nuestros colegas de Autologia, donde compararon a un Nissan Kicks con ESP versus el desempeño del mismo, pero sin el programa de estabilidad. El modelo sin ESP casi se vuelca estrepitosamente, dejando en evidencia lo importante de este sistema.
En Chile, de a poco, el ABS ha comenzado a tener una mayor penetración en los distintos segmentos, sin embargo, cuesta mucho encontrar (por decir que casi no hay) un modelo bajo los 9 millones de pesos con ESP. En algunos casos, hay modelos de sobre 10 millones de pesos que no lo consideran hasta sus versiones tope de linea.