En febrero de este año se presentó en el Salón de Chicago la edición especial del MX-5 que celebra sus treinta años, en los que se ha ganado los reconocimientos por ser el descapotable biplaza más vendido del mundo con más de un millón de unidades en la cuenta hasta hoy.
Fue en 1989, en el mismo Salón de Chicago, cuando Mazda reveló el MX-5 definitivo, que estaba inspirado en los deportivos británicos de los años sesenta por el concepto de un auto compacto, liviano, con una buena puesta a punto y económico, pero que que en este caso era fabricado por una marca japonesa. Con esos atributos técnicos y junto a su carisma juvenil que se ha mantenido hasta su cuarta y actual generación, se fundó la identidad y el éxito del MX-5.
La edición especial en cuestión viene pintada en un llamativo Racing Orange e incluye equipamiento especial que parte en emblemas que declaran la numeración de cada una de las 3000 unidades de esta edición, llantas Rays ZE40 RS30 de 17 pulgadas, frenos Brembo en el tren delantero, butacas Recaro, detalles contrastantes en naranja contra el interior negro y un sistema de infoentretenimiento que sí incluye Android Auto y Apple CarPlay.
Todo esto se aplicará sobre la base del MX-5 RF, es decir, la versión de techo sólido del notable MX-5 Roadster. Este lleva un motor de cuatro cilindros en línea, naturalmente aspirado, de dos litros de cilindrada, que produce 181 Hp y 204 Nm de torque a través de una caja automática de seis velocidades que envía la fuerza a las ruedas traseras. El conjunto pesa tan sólo 1127 kilos en vacío, lo que está perfectamente distribuido entre ambos ejes en una proporción 50:50.
De esta versión exclusiva y conmemorativa versión del MX-5 sólo llegarán 3 unidades a Chile a un precio de $28.990.000.
