La historia de NIO la hemos contado algunas veces acá en Autocosmos. Y es que esta startup tecnológica china ha maravillado a la industria con su propuesta de movilidad eléctrica y lo bien que le están quedando sus productos, al punto que ya se le bautizó como “la Tesla china”.
Hoy, NIO sorprende con una atrevida y costosa medida tendiente a cautivas a sus actuales y futuros clientes: reemplazar las baterías de sus autos sin costo alguno.
Este servicio de recambio de baterías se realiza desde esta misma semana en los 80 puntos levantados por NIO durante 2018 para estos fines en las principales ciudades de China. Hasta ahora, este cambio de baterías tenía un costo de 180 yuanes, unos 25 dólares ($18.000).
Básicamente, NIO ofrece a sus clientes tres modos de continuar el camino tras agotar la batería: carga rápida en una hora (355 kilómetros extra de autonomía), reemplazo de la batería en tres minutos y sistema de carga desde furgones móviles (100 km extra en 10 minutos).
La marca quiere tener operativo otros 1.100 puntos de recambio de baterías para finales de 2020, con el fin de capturar clientes en el mayor y más competitivo mercado de autos eléctricos del mundo.
NIO se fundó en Shanghai en 2014 y deslumbró al mundo con una poderosa carta de presentación en mayo de 2017: su híper deportivo eléctrico EP9 batió el récord del circuito de Nürburgring con 6:45,9. Meses después iniciaba la comercialización del ES8, su primer modelo de calle.
A mediados de 2018 lanza su segundo modelo, el ES6, y poco después lanzó una IPO en la bolsa de Nueva York. Este año acumula ventas por 20 mil unidades en China, poco para ese mercado, pero acorde con su segmento de precios.
