Porsche 911 Turbo S 2021 finalmente pisa suelo nacional

Uno de los Porsche más deseados y el más potente sin una jaula o butacas de competencia, ya está en el país. Se trata de la variante Turbo S del 911 (992), tanto en su versión coupé como cabrio. Este modelo fue presentado de manera global en marzo de este año y en Chile inició su preventa en octubre.

Lo que más importa: su tren motriz

• Esta nueva unidad se denomina 9A2 Evo, aunque sigue siendo un bóxer de seis cilindros y 3.8 litros con dos turbocompresores de geometría variable, de disposición simétrica y con válvulas de blow-off electrónicas.
• El diámetro de las aspas de la turbina fue incrementado en cinco milímetros para llegar a 55 mm, mientras que las aspas del compresor de 61 mm son ahora tres milímetros más grandes.
• Presenta inyectores piezoeléctricos.
• Alcanza una potencia de 650 Hp y 800 Nm de torque. Esto es 70 Hp y 50 Nm más que el Turbo S anterior.
• Se asocia a una transmisión automática PDK de doble embrague y ocho velocidades, específica para esta variante. 
• Gracias a la tracción AWD, este auto alcanza los 100 km/h en 2,7 segundos, 0,2 segundos más rápido que el Turbo S anterior.
• Los 200 km/h los logra en 8,9 segundos, un segundo más rápido que su predecesor.
• El sistema PTM (Porsche Traction Management) puede enviar hasta 500 Nm de torque al eje delantero.
• Puede lograr una velocidad punta de 330 km/h, la que logra en la sexta marcha.

Aerodinámica y chasis

• Con 1.840 mm de ancho en el frente y 1.900 mm en la parte trasera, logra un mayor aplomo y estabilidad en la carretera.
• Por primera vez cuenta con medidas asimétricas para los neumáticos: 255/35 R20 en el frente y 315/30 R21 en el eje trasero.
• Cuenta con aerodinámica activa (Porsche Active Aerodynamics) con faldón delantero, rejillas activas y alerón trasero que se mueven automáticamente. Ayudan a generar carga aerodinámica o a aumentar la refrigeración, en el caso del faldón delantero. El alerón trasero genera hasta un 15% más de carga aerodinámica que su predecesor.
• El 911 Turbo S cuenta con las clásicas entradas de aire sobre los guardafangos traseros, pero las rejillas de la tapa del motor también ocultan dos tomas de aire que quedan por delante de los filtros de aire.
• También se equipa el sistema de suspensión activa PASM (Porsche Active Suspension Management) que permite rebajar la altura del auto en 10 mm y que actúa de manera más rápida e inteligente.
• De serie, incorpora el sistema PDCC (Porsche Dynamic Chasis Control) con barras estabilizadoras activas, y los frenos PCCB (Porsche Carbon Ceramic Brakes) con discos cerámicos y cálipers de diez pistones en el eje delantero.

Sigue siendo un Porsche Turbo tradicional

• ​​​​Inconfundible es su silueta muscular con pasos de rueda mucho más anchos, sus tomas de aire laterales y sus grandes llantas.
• En el frente destacan sus entradas de aire más prominentes y sus focos con matriz de LED.
• El parachoques trasero exhibe las clásicas salidas de aire laterales y dos grandes escapes cromados.
• Las butacas, por su diseño, rinden tributo al Porsche Turbo original, el icónico 930.
• La pantalla central del PCM ahora mide 10.9 pulgadas y cuenta con una interfaz renovada.
• Se suman al paquete, el volante deportivo GT, el paquete Sport Chrono y un sistema de sonido Burmester de alta fidelidad.

El Porsche Turbo S en su alternativa Coupé tiene un valor de entrada de 258.900 dólares, mientras que la variante Cabriolet comienza en los 272.900 dólares. Por este año ya no hay unidades disponibles, puesto que los cuatro autos asignados para Chile ya fueron reservados.