Volvo y otras empresas multinacionales han solicitado a la Unión Europa que a partir de 2035 se prohíba la venta de automóviles con motores de combustión interna en todo el continente. Dicho de otra manera, lo que se busca es que a partir de 2035 las marcas de autos con presencia en Europa únicamente puedan comercializar vehículos eléctricos.
En total, son 27 las compañías de diferentes sectores que han realizado un llamamiento conjunto a los legisladores de la Unión Europea para que fijen 2035 como la fecha límite para la venta de autos nuevos equipados con motor de combustión.
Según la Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente (T&E, por sus siglas en inglés), esta petición abierta irá sumando apoyos para la eliminación gradual de los modelos de combustión, con la vista puesta en la revisión de las normativas de emisiones de dióxido de carbono que prepara Bruselas.
Todos los firmantes consideran que una fecha fija enviaría una clara señal de inversión a los fabricantes de automóviles, así como a las cadenas de suministro y a los proveedores de infraestructuras, lo que permitiría la descarbonización de la flota.
Las empresas impulsoras de esta convocatoria destacan que establecer un objetivo de CO2 de 0 gramos por kilómetro en 2035 consagraría la eliminación progresiva de los autos de gasolina y diésel, incluyendo los híbridos.
Las empresas que se han adherido a la petición abierta hasta el 26 de abril de 2021 son:
- Allego
- Ample
- Arrival
- Chargepoint
- Coca-Cola European Partners
- Electreon
- Enel X
- EV Box
- Fastned
- Greenway
- Iberdrola
- Ikea Retail
- LeasePlan
- Leclanché
- Li-cycle
- Lime
- Metro
- Novamont
- Novo Nordisk
- SAP Labs in France
- Schneider Electric
- Sky
- Uber
- Vattenfall
- Verkor
- Volvo Cars
- Vulcan Energy
De ellas, sólo Volvo es fabricante de autos, y la marca sueca ya se impuso una fecha tope para su propia transición energética: en 2030 se acabarán los autos contaminantes en la marca.