Tuvieron que pasar 6 años, 6 meses y 19 días para que el finlandés Esapekka Lappi ganara de nuevo en el Campeonato Mundial de Rallies (WRC), marcando la mayor diferencia entre una victoria y otra en la historia de la categoría, y dándole el segundo triunfo del año a Hyundai.
El escandinavo llegó al WRC en 2017 como una de las grandes promesas del deporte, sin embargo, tras ganar ese año el Rally de Finlandia, con Toyota, su rendimiento no ha sido el mejor, sumando 13 podios desde ese momento y quedando fuera del top 5 final del Campeonato en todos los años, salvo 2018.
Así que este triunfo y lo bien que se vio esta semana al volante del Hyundai i20 N Rally1 Hybrid, pueden ser el impulso que necesitaba para ser un contendiente al título.
“Se siente realmente bien. Llevo bastante tiempo buscando esta segunda victoria. Me gustaría decir un millón de cosas pero probablemente olvidaré muchas de ellas. Muchas gracias a Cyril [Abiteboul, presidente y director del equipo de Hyundai Motorsport], que me mantuvo en el equipo después de una segunda mitad muy mala el año pasado. Es un contraste bastante grande desde ese momento hasta ahora. Así que gracias al equipo. Y mi familia también”, afirmó el finlandés.
Detrás de Lappi finalizó el galés Elfyn Evans (Toyota) y el francés Adrien Fourmaux (Ford), este último perdió el segundo peldaño del podio este domingo luego de golpear un monte de nieve.
Tras este resultado, el belga, Thierry Neuville (Hyundai) se mantiene como el líder del Campeonato de Pilotos, seguido por Evans y Fourmaux. Lappi está en el sexto puesto de la clasificación, pues no sumó unidades en Montecarlo.
La próxima parada de la temporada 2023 del Campeonato Mundial de Rallies será del 28 al 31 de marzo para correr el Rally de Kenia.
