Vende tu auto
Test drive

Test Drive Mitsubishi L200 2025, más segura para trabajar y más amplia para la familia

La L200 2025 representa una de las evoluciones generacionales más certeras del mercado, atendiendo todos los puntos flacos de la generación anterior para transformarse en una camioneta equilibrada, versátil y tremendamente recomendable.

Test Drive Mitsubishi L200 2025, más segura para trabajar y más amplia para la familia

En mayo de este año, Mitsubishi presentó la sexta generación de la camioneta L200 en Chile. Viajamos a San Pedro de Atacama a conocerla y a probarla, incluyendo unas "hot laps" con Hiroshi Masuoka, dos veces ganador del Dakar con la marca de los diamantes. Es que comercialmente hablando, la L200 es uno de los vehículos más importantes de Chile por su volumen de ventas, por ende, es un vehículo importante de probar y conocer en su desarrollo, el cual tenía bastante margen para mejorar, considerando que con las camionetas, así como pasa con los vehículos comerciales y pesados, su ciclo de vida de generación en generación suele extenderse bastante más que con los autos de pasajeros.

Con esta nueva L200 hay mucha tela que cortar ya que su desarrollo es completamente nuevo e incluso se tomó en cuenta a Chile para mejorar algunas de sus funcionalidades, detalles que se agradecerán en faenas de distintos tipos.

Mitsubishi L200: dimensiones y diseño

  • Largo: 5.320 mm
  • Ancho: 1.865 mm
  • Alto: 1.795 mm
  • Entre ejes: 3.130 mm
  • Pick-Up: entre 900 a 1.000 kilos (4x4 y 4x2, respectivamente). Cabe un pallet de 1,2 por 0,8 m.
  • Despeje minimo: 228 mm

La L200 ha crecido en dimensiones, a pesar de que los 5,3 metros de largo y los casi 3 metros entre ejes son medidas muy tradicionales en el segmento. Ahora, la distancia entre ejes ayuda a generar un habitáculo un poco más amplio, lo que siempre se agradece en temas de confort. También cuenta con 228 mm de despeje, más que suficientes para enfrentar caminos malos, baches y diferentes tipos de terreno. Si te falta, por supuesto que puedes modificar la camioneta tú mismo con un kit de levante y neumáticos acorde.

De diseño, el cambio es dramático y sabemos que no les va a gustar a todos. Lo que sí hizo Mitsubishi, fue definir dos estilos según el tipo de usuario. Por ejemplo, las versiones Work y Katana tienen una máscara más utilitaria, con una parrilla plástica y elementos color carrocería. En el caso de la Dakar, que es la versión tope de gama y orientada a clientes particulares (no a flotas), cuenta con una parrilla de barras horizontales y dos corchetes cromados, que son parte del estilo "Dynamic Shield" de la marca.

A muchos no les ha gustado este rediseño tan cuadrado, al lado de la afilada generación anterior de estilo más agresivo, pero lo que Mitsubishi quiere lograr con esta generación es una propuesta más robusta y eso si se da en esta L200, de capot más alto y con pliegues que le dan solidez. Para "maquillar" la altura extra del frontal, se optó por focos desdoblados, muy a la moda.

En las versiones Dakar, si lo quieres, también puedes equipar algunos accesorios, como pasos de rueda plásticos, molduras en las puertas y hasta una barra deportiva en el pick-up.

Lo único que nos hubiese gustado es un portalón amortiguado para que no se azote tanto, pero el resto respeta bastante la funcionalidad que una camioneta como esta debe tener, con ganchos y un revestimiento plástico para proteger la zona de carga. Las pisaderas se hicieron más anchas y fuertes, mientras que las luces LED a mejorar la visualización en condiciones de oscuridad.

Se agradece también que desde la versión Katana (intermedia) ya hay vidrios tinteados y neblineros.

En resumen, podrá no ser la camioneta más linda o la más agresiva, pero hay que entender que a veces el diseño no busca belleza, sino que propósito y en ese sentido, cumple.

Mitsubishi L200: interior

Por dentro, la L200 es otra camioneta. Y aunque no tiene el futurismo o el lujo de las nuevas camionetas chinas, o la sensación poderosa y acogedora de camionetas como la Ranger, esta L200 esta años luz de su generación anterior y con una ergonomía actualizada, acorde a los dispositivos que lleva.

Lo mejor de todo es que, a pesar de que es más moderna, no renuncia a la funcionalidad. Todo lo que los ingenieros japoneses nos contaron sobre el desarrollo de la L200, es cierto y completamente apreciable, porque la idea de dar más confort de marcha no es tan solo para que una familia se sienta como en un SUV, sino que para hacer más agradable las largas jornadas de ruta de diferentes operadores que usan la camioneta como vehículo de tránsito, supervisión y trabajo.

Por ejemplo, los pedales están más separados, para que operadores con bototos tengan una mayor seguridad de uso. También se mejoraron los posavasos, porque se descubrió que cuando una botella no cabía, los operadores las acumulaban en el piso de la camioneta, donde podían resbalar y atorarse en los asientos o incluso llegar a la zona de los pedales. Además, esto les permite usar botellas que puedan reutilizar, en lugar de juntar botellas para desechar, un detalle que les puede parecer muy específico, pero que los ingenieros también tomaron en cuenta.

Los asientos delanteros son un poco más altos, pero tienen el respaldo rediseñado, lo que les permite a los operadores girar el tronco de manera más cómoda para acceder a cosas que hayan dejado en la fila de atrás, sin olvidar grandes manillas y botones, que sean fáciles de utilizar, incluso si usas guantes. Y las plazas traseras se nota que son más amplias y cómodas, para lo que uno espera en este segmento. Ya no se hace tan insufrible ir atrás y esto es ideal para quienes las usan con su familia, porque incluso, el cojín central, aunque es más alto, es mullido y aun permite un margen suficiente sobre la cabeza.

Sobre los elementos tecnológicos, Mitsubishi no ha querido apostar por los paneles panorámicos vistos en camionetas chinas o por el minimalismo. Es más, se quedaron con tecnología actual, pero funcional. Por ejemplo, el clúster de instrumentos combina dos relojes analógicos con una gran pantalla LCD multifunción, la cual es tremendamente completa y legible. Lo mismo podemos decir del sistema multimedia, con pantalla de 8 o 9 pulgadas y dispuesto en la misma línea que el clúster, en altura, con botones y perillas. No tiene ni por si acaso la interfaz más moderna (es realmente anticuada) pero es lógica, fácil de usar y con lo que necesitamos, sea GPS, Apple CarPlay y Android Auto, así como cámaras de retroceso (o en 360°) que no tienen la mejor resolución, pero que al menos están.

El equipamiento es suficiente y hace que para muchos, no sea necesario escalar a la versión tope de línea. La versión Work y Katana son similares y cuentan con equipamiento eléctrico completo, aire acondicionado y el computador a bordo. El modelo Dakar se arranca con tapiz de cuero, espejos con plegado eléctrico y defroster, climatizador dual y acceso keyless.

Los materiales son duros, pero con mejor aspecto que en la L200 pasada, con costuras visibles y granos de mejor aspecto, al margen de algunos detalles mínimos de armado (nuestra consola central, de color negro piano, estaba un poco "salida" en una esquina) pero son cosas que se perdonan en un vehículo de este tipo. Nadie se compra una L200 buscando el confort de un BMW y eso está claro, a pesar de que hay fabricantes que están subiendo la vara en modelos más recreacionales.

Mitsubishi L200: seguridad

La L200 finalmente paga la eterna deuda que tenía con el ítem seguridad, alcanzando estándares bastante altos desde el modelo de entrada.

Esta generación enfrentó pruebas de impacto por parte de ANCAP (Australia) y ASEAN NCAP (Sud Este Asiático). En ambas evaluaciones, obtuvo una calificación máxima de 5 estrellas, convirtiéndose en la primera camioneta de doble cabina que logra este resultado, conforme a los nuevos protocolos 2023-2025 de la organización. Más tarde, también superó con cinco estrellas las pruebas de Latin NCAP.

De serie, todas las L200 equipan:

  • Siete airbags
  • Frenos de disco delanteros
  • Inmovilizador
  • Cierre centralizado automático
  • ABS con EBD
  • ISOFIX
  • Señal de frenado de emergencia (ESS)
  • Control activo de estabilidad (ASC)
  • Asistente de estabilidad de remolque (TSA)
  • Asistente de partida en pendiente (HSA)
  • Sensor de retroceso (desde versiones Katana)

Luego, las versiones Dakar agregan monitor de punto ciego, sensores de estacionamiento (delantero y trasero), control de descenso (solo AT) y un paquete de ADAS (Safety Sensing) que incluye:

  • Luces altas automáticas
  • Frenado automático con detección de peatones
  • Alerta de tráfico cruzado
  • Asistente de cambio de carril
  • Advertencia de punto ciego

Y la mejor noticia es que a partir de enero, las versiones Katana también llevaran el paquete de ADAS en su equipamiento.

Mitsubishi L200: tren motriz

Antes de pasar al motor y al manejo, es bueno hablar de esta nueva plataforma, la cual no comparte absolutamente nada con ninguna de las marcas socias de Mitsubishi (Nissan y Renault). Esta base es más larga y más ancha, con un 60% de aumento en la rigidez por torsión y un 40% de aumento en la rigidez estructural, pensada tanto para trabajo pesado como para aguantar en competiciones de rally.

Además, ingenieros japoneses vinieron exclusivamente a Chile a probar la suspensión en base a las calaminas nortinas. Se mantuvo el sistema de ballestas trasero, pero se trabajó en hacerlas un poco más refinadas, buscando combinar capacidad de carga con algo más de confort. Se montó dirección con asistencia eléctrica y se aisló el selector de la transmisión manual, para cambios más precisos. Si se mantuvo los frenos de tambor atrás y eso es algo que se podría haber mejorado.

Con esta base, pasamos al motor, el mismo que ahora le permite arrastrar 3.5 toneladas, un cambio grande con respecto a la anterior L200. Es un 2.4 Biturbo Diésel (4N16) con sistema MIVEC (Super High Power), el que desarrolla 201 Hp y 470 Nm de torque, asociado a una caja 6MT o 6AT, con consumos entre 12 y 13 km/l en ciclo mixto, pero que en mi caso fueron más cercanos a los 10 km/l. Este motor tiene distribución por cadena y mejoras en el sistema DPF. El alternador se elevó para evitar daños y se modificó la posición de los sensores ABS para que no se obstruyeran o dañaran tanto en faenas.

El resultado lo podemos ver en un motor que tiene menos lag y una banda de torque más plana y más contundente, para un manejo más equilibrado y más administrable. Y con la potencia extra, pudimos ser testigo de cómo este nuevo motor se "apuna" bastante menos, en caso que tengas que manejar en altura.

El sistema Super Select 4WD II que equipan las versiones Dakar es superlativo. No solo cuenta con la ayuda del Active Yaw Control (torque vectoring), sino que de siete modos de tracción, los cuales aparecen según el tipo de tracción que tengas seleccionado sea el 4H automático, el 4H con bloqueo central o el 4L con bloqueo central.

Para explicar en fácil en que se traduce todo esto, es que la L200 es menos brusca en su salida, tiene un empuje más parejo en la parte baja-media del tacómetro y permite ser más preciso con el acelerador. También, que su conducción agota menos, ya que no hay que pelear tanto la dirección y que como el chasis es más firme, la camioneta es más estable, porque se reducen las flexiones innecesarias en la estructura, lo que propicia un mejor comportamiento de la suspensión y un manejo más predecible.

Mitsubishi L200: conclusiones

Con precios que van desde los $25.990.000 (+ IVA) hasta los $37.990.000 (+ IVA), la sexta generación de la Mitsubishi L200 es un auténtico ejemplo de cómo ejecutar de manera racional y certera, un recambio generacional. La marca japonesa se concentró en su público y en todo lo que a la camioneta se le achacaba en falta, desde los problemas con el DPF, la falta de potencia en altura o la capacidad de remolque, hasta lo más importante que es el estándar de seguridad.

Hoy, la L200 no aspira a ser la camioneta más lujosa y mucho menos la más moderna, sino que la camioneta ideal para los tiempos de hoy, que pueda ser usada de manera confiable y efectiva en faenas, pero también que sea una gran compañera de aventuras para la familia, agradable y funcional.

Es una camioneta recomendable por su nivel de seguridad, por su espacio y capacidad. Además está correctamente equipada y configurada. No hay donde perderse, si al menos buscas una camioneta que sepa defenderse bien en el trabajo y con la que también te puedas ir relativamente cómodo de vacaciones.

Mitsubishi L200 2025 - más segura para el trabajo, más amplia para la familia (Test Drive)

Jorge Beher recomienda