
La sexta generación del Suzuki Swift ya está en Chile. Como sabemos, es un auto ícono para la marca japonesa, el cual cumple 40 años de historia y que después de su tercera generación, se transformó en un modelo global, muy apreciado en todos los mercados donde se vende, simplemente por ser un auto sensato, sencillo, entretenido de manejar y con un diseño atractivo. Además, Suzuki no se olvidó nunca de quienes lo compraban como deportivo, por lo que mantuvo al modelo Sport como reemplazo del ágil GTI, siendo un auto favorito de muchos.
No hay quienes no hayan tenido contacto con un Swift, sea teniendo uno, o habiéndose subido a uno, de la generación que sea, así que es un auto tremendamente importante de revisar y conducir, porque es uno de los autos más populares de Chile y uno que tiene muchas particularidades.
En esta sexta generación hay cambios sustanciales, los suficientes como para marcar un antes y un después en algunas características que definían a este modelo.
Suzuki Swift 2025: dimensiones y diseño
- Largo: 3.860 mm
- Ancho: 1.735 mm
- Alto: 1.520 mm
- Distancia entre ejes: 2.450 mm
- Maletero: 265 L
El Suzuki Swift 2025 es un auto un poco más elegante y moderno que el anterior. Si bien conserva su silueta tradicional que lo identifica como un Swift, hay importantes cosas que notar. Por ejemplo, es más largo y tiene más capacidad en el maletero (es usable, al fin). Eso es aparente al compararlo con sus anteriores generaciones y además es celebrado por una línea de cintura envolvente, la misma que además hace de corte en el capot. Justo bajo esta, hay dos pliegues menores que resaltan los pasos de rueda en ambos extremos. Si a esto le sumamos que vuelven las manillas traseras tradicionales (antes ocultas en el pilar C), se da una imagen más madura y sólida.
La modernidad está dada por los grupos ópticos en ambos extremos, con fondo ahumado y secciones plásticas retroiluminadas que incluso parecen encendidas de día. Se conserva la opción de techo bitono, la que hace juego con las llantas diamantadas y los efectos de los focos. En el frente podemos distinguir dos cosas importantes, como es el recambio de la parrilla, la que relega el logo de la marca en la trompa y segundo, dos detalles que delatan la procedencia de este modelo: el Swift fabricado en Japón cuenta con una parrilla de marco más grueso (poco atractiva si me preguntan a mi) y un parachoques sin encastres para los neblineros; el modelo indio... bueno, todo lo contrario (parrilla más delgada y encastres para los neblineros).
Si el Swift te gustaba por su aspecto más deportivo, en este caso creo que se apuesta por algo menos agresivo pero más transversal. Algo curioso e importante de notar lo encontramos en las llantas, de 15", las que evidentemente son pequeñas y también le juegan en contra a la hora de manejar, pero eso lo comentaremos más abajo. Otro detalle que puedes haber notado es la etiqueta "Hybrid" en el maletero, porque si, el Suzuki Swift desde ahora es un auto microhíbrido en todas sus versiones.
Suzuki Swift 2025: interior
El interior, aunque completamente nuevo, es típicamente Suzuki, o sea mucho plástico duro y económico, pero un estándar ergonómico clásico de cualquier marca de origen japones: todo a la mano y fácil de usar. Por supuesto que hay detalles un poco más bonitos como la mejora en la percepción de algunos granos en el plástico, algunas zonas texturadas, el acolchado en las puertas o el tapiz de los asientos. Incluso, algunos botones lucen mejor que en otros modelos de la marca, pero insisto, todo desde un prisma de economía y sencillez. Y a no engañarse, probablemente el auto de origen japonés tiene los mismos materiales.
Lo más relevante en temas de interior es que la pantalla del sistema multimedia ahora está más alta, lo que permite que la podamos manipular mejor. Lástima que no tenga perillas, más que botones táctiles, así que tendrás que aprender a vivir con ello, o conformarte con los botones del volante. Lo que sí, es un sistema de fábrica, lo cual lo hace rápido y confiable. No es el más atractivo, pero tienes Apple CarPlay y Android Auto inalámbrico, acceso a la telemetría del computador a bordo (incluyendo el flujo de energía de la batería) y la cámara de retroceso.
En cuanto al equipamiento, vamos encontrando cosas que usualmente vemos en los rivales europeos del Swift, como encendido por botón, climatizador, encendido automático de luces y plegado eléctrico de los espejos. Algunas de estas vienen de serie, como el volante multifunción y otras solo en esta versión GLX.
La posición de manejo es cómoda, aunque delata la economía del modelo, con un volante solo regulable en altura y asientos abutacados pero de soporte blando; tengo que decirlo, pero para la gran mayoría de usuarios del Swift, no es algo que vaya a ser muy relevante. Si eché de menos un apoyabrazos o una consola central más alta, pero está bien. Hay algunos espacios portaobjetos menores como un par de posavasos, un cubículo para guardar cosas cerca de donde están los puertos USB y nada extra que valga la pena mencionar.
El clúster de instrumentos es legible y se renueva poco, buscando que el display digital central pase "piola" con un fondo oscurecido en el resto de los relojes y que recuerda un poco a lo que hacía BMW para camuflar sus pantallas entre sus relojes analógicos, en los tiempos que aun tenían marcadores reales. Solo el tacómetro cuenta con un anillo plateado. Raro que Suzuki mantenga las arcaicas perillas para hacer funcionar el clúster, si bien en el volante, el botón "Info" cumple la misma función.
Los asientos de atrás son correctos. Dos adultos irán cómodos, con un puño de margen al techo. Tres adultos irán más apretados en el ancho, pero gracias a que no hay apoyabrazos y que la banca no es tan abutacada, el confort es bueno. Tres niños van de sobra. Si vienes de un Swift mucho más antiguo, sentirás la diferencia en espacio; si vienes del anterior, quizás no tanto.
Suzuki Swift 2025: seguridad
Algo inédito y que nos sorprende, pero también nos alegra de la propuesta de Suzuki (y que esperamos no la diluyan con versiones de entrada más pobres) es el estándar de equipamiento de seguridad. Porque el Suzuki Swift, una de las grandes falencias que tenía es que solo los modelos más caros venían con seis airbags y nada más.
Pero hoy, desde el modelo más accesible y como algo único en su posición comercial (hatchbacks compactos del segmento B), el Swift se luce, no solo con seis airbags, sino que también con asistencias a la conducción, tales como alerta de colisión frontal, función de asistencia al frenado, frenado autónomo de emergencia, alerta de cambio de carril, asistente de permanencia en el carril y control crucero adaptativo. El modelo GLX que participó de nuestro test, además agrega luces altas automáticas, asistente de punto ciego y alerta de tráfico cruzado.
Esto se suma a cinturones de seguridad de tres puntas en todas las plazas (con testigos de uso), ESP e ISOFIX entre lo principal. Todos sabemos que falta la evaluación estructural de la carrocería cuando pase por algunas de las instancias de NCAP, pero al menos, todo este arsenal ya lo pone en amplia ventaja sobre otros modelos, incluso si quisieras comprar el modelo "desde".
Una observación sobre el uso de estas, las cuales fueron probadas en su totalidad, es el sistema de mantenimiento de carril, el cual pareciera actuar con mucha asistencia sobre el tren delantero y a velocidades de carretera da una sensación como de "dirección suelta" lo que puede entregar una percepción de inseguridad, si es la primera vez que te enfrentas a la conducción asistida por ADAS. Ojala la marca logre afinar estos detalles en futuras revisiones del modelo.
Suzuki Swift 2025: tren motriz
Con todas las novedades del Suzuki Swift 2025, también hay cambios en el area mecánica. Se estrena un motor completamente nuevo, de la familia Z. Hablamos del Z12E (Euro 6c) de 80 Hp y 112 Nm con sistema Start/Stop, VVT e inyección Dualjet, apoyado por un sistema MHEV de 12v, similar al que emplean modelos actuales de Suzuki, pero con un motor eléctrico ISG más potente (2,3 kW y 60 Nm, versus 1,94 kW y 50 Nm del anterior) y una batería de mayor capacidad (3 Ah a 6 Ah). También se reemplazó la transmisión robotizada AMT por una caja CVT, pero nuestra unidad mantiene la caja manual de cinco velocidades.
El consumo homologado de este auto es de 21,3 km/l en ciudad y 25 km/l en carretera, cifras fantásticas para los tiempos actuales. Claro que yo logré promedios de entre 16 a 17 km/l, lejos de los 23,3 km/l en ciclo combinado que obtuvo el 3CV en sus pruebas de laboratorio. De que el auto puede llegar a marcar 20 km/l y más en algunas circunstancias, lo puede hacer, pero son metricas del medidor instantaneo, o sea algunos peaks de bajo consumo. No nos engañemos, 16 a 17 km/l siguen siendo magníficas cifras, pero no es quizas lo que va a lograr la mayoria.
Hablemos de potencia. Si, los 80 Hp son bastante modestos para un Swift, al margen de que sigue siendo un auto liviano. Para uso en ciudad, probablemente no vas a sentir que te falte más, porque el auto se optimizó para ese uso. Si vas en cuestas, si superas los 110 km/h en carretera o vas con más peso, vas a tener que trabajar esos 80 Hp y 112 Nm con la caja de cambios, llevando el auto más arriba en el tacómetro y jugar constantemente con las marchas. Lo unico positivo es que el sistema MHEV ahora participa mucho más ya que el motor eléctrico es más potente y la autonomía de la batería permite mantener un poco más de energia. No es un sistema descollante, sino que solo sirve para apoyar cifras de emisiones, de consumo y quitarle stress al motor, para que no te ilusiones, pero la mejora es más notable al lado del sistema MHEV del Swift Hybrid saliente o del XL7.
Quizas lo que menos me gustó del Swift tiene que ver justamente con lo que más define a este modelo: su manejo. Quizas tiene que ver con sus neumáticos angostos y sus pequeñas llantas de 15", o quizas con la calibración de la suspensión, pero es un auto más comodo, más blando y aunque sigue siendo agil, el saborcillo deportivo se ha perdido, probablemente para apetecer a un público más variado y que no va a valorar tanto el manejo de este auto. La rotación del auto sigue siendo maravillosa, porque siempre sientes que el auto se mueve completo y de manera compacta, lo que habla de un buen centro de gravedad, pero se percibe más blando y eso hace que cabecee más y que sea un poco más "flan" en ciertas circunstancias.
Suzuki Swift 2025: conclusiones
Con precios entre $14.690.000 y $17.590.000 (pueden bajar con un bono marca de $1.300.000), el Suzuki Swift hoy más que nunca es un auto altamente recomendable. Conectado, ágil, económico y confiable, ahora también es un auto muy completo en dispositivos de seguridad. Es una tremenda alternativa entre los autos de ciudad y con precios que, aunque han subido, se justifican mucho, o sea la relación precio/equipamiento, es alta y garantizada por todo lo que significa un Suzuki.
Por supuesto que los plásticos interiores son austeros y con eso no hay sorpresas. Donde sí hay sorpresas es con su modesto motor, el cual privilegia la economía y ecología por sobre la respuesta general, además de una puesta a punto más blanda y cómoda en su conducción.
Si te gustaba el Swift por su manejo más "deportivo", mejor que busques el modelo saliente. Pero si andas buscando un gran auto de ciudad, que se sepa abrir camino en el tráfico, más cómodo de andar y muy completo en equipamiento, este nuevo Swift es sin dudas una de las mejores alternativas que hay en nuestro mercado.
Suzuki Swift 2025 - sacrificando deportividad para ser un mejor auto (Test Drive)