Luego del terremoto que se produjo con la nueva organización global de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, analizamos más en detalle que pasaría en nuestra parte del mundo ya que la reducción de plataformas y fábricas sería radical.
El nuevo plan de la Alianza prevee que las marcas líderes de cada región serán las que permanezcan al frente en desarrollo de productos, dejando a las otras dos como simples acompañantes. La primera definirá y desarrollará los productos necesarios para esa región específica y las otras dos tendrán sus mellizos, algo así como lo que ocurre con las pick-ups NP300 Navara y Alaskan, a las que se sumará pronto la L200.
En nuestro caso, mejor dicho en la región sudamericana, la marca líder es Renaut, con Nissan y Mitsubishi acompañando, irónicamente todo lo contrario de lo que ocurre en Chile, donde tanto Nissan (filial) como Mitsubishi (SKBergé) venden más que Renault (Derco).
Es bueno aclarar que para la estructura, México es parte de Norteamérica y queda unida a Estados Unidos, por lo que allá Nissan será quién lleve la batuta.
1 Plataforma 2 fábricas en el segmento B
El comunicado de las marcas aclara que: “En América Latina, las plataformas de Productos B se racionalizarán, evolucionando de cuatro variantes a una sola para los productos Renault y Nissan. Esta plataforma se producirá en dos plantas, cada una de las cuales producirá para Renault y Nissan”.
Actualmente en la región, la Alianza declara tener 4 variantes de plataforma para 6 modelos, Renault tiene Sandero, Stepway, Logan, Captur (curiosamente no nombran al Duster), mientras que Nissan fabrica el March y el Kicks.
La Plataforma
La plataforma en cuestión será la CMF que, siguiendo las actuales tendencias, es altamente modular. Ya la tenemos en el Kwid (CMF-A) y en su variante CMF-B podría darnos 7 modelos, incluyendo los mencionados anteriormente y el nuevo Nissan Versa.
Este cambio generacional podría traernos también alguna que otra nueva propuesta, como el posible SUV de 7 asientos que te anticipé hace unos días.
Acá viene el problema. La Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi tiene actualmente cinco fábricas en nuestra región: una en Colombia, dos en Brasil (una del rombo, otra de los nipones) y una o dos en Argentina, dependiendo de cómo se cuente, ya que la planta de Santa Isabel tiene líneas para Renault y otra para la pick-up de Nissan. ¿Qué pasará?
Esto ya es meramente especulativo, pero Brasil se quedará con sus dos plantas y Santa Isabel pasará a ser un centro de utilitarios, con la NP300 y la Alaskan como su producto estrella.
¿Y Chile?
Nueva especulación porque es difícil saberlo. Renault es un importador y lo más seguro es que se siga abasteciendo de dónde pueda y lo dejen. Algo llegará de Europa (Mégane, Clio, Captur, Arkana, los furgones), los modelos colombianos (Symbol y Duster) se sumarían a lo que ya viene de Brasil (Oroch), y la Alaskan seguiría llegando desde México. La duda que nos queda es el Koleos, que proviene de Corea.
Respecto de Nissan, esta subsidiaria reporta a la oficina regional que está en México, país que es el mayor abastecedor de modelos para este lado de Sudamérica. Esto no debería cambiar en absoluto. La NP300 seguirá llegando desde Aguascalientes, lo mismo que el Kicks y los modelos de pasajeros como el Tiida, March, Versa y Sentra. Y los SUV grandes son estadounideneses y eso seguirá siendo así. ¿Algo de Brasil? Quizás a futuro, pero dependerá de una decisión interna en pos de una mejor distribución del abastecimiento.
¿Y Mitsubishi? La futura L200 será una NP300 Navara, no hay vuelta atrás. Sería el único modelo que podría cambiar de origen a una planta de Nissan, pero el resto debería mantener origen de producción.
