Vende tu auto
Test drive

Toma de Contacto: BMW 330i M Sport Touring

A título personal, probablemente el único BMW que podrías necesitar.

Toma de Contacto: BMW 330i M Sport Touring

No existe el auto ideal, porque todos tenemos ideales distintos. Pero si a mi me preguntan cual seria mi BMW nuevo ideal, probablemente se parezca un poco al modelo que te tengo aquí. Se trata del Serie 3 de BMW, que sufrió un facelift el año pasado pero que ahora también puedes encontrar como un modelo station wagon, o Touring como se le dice en lenguaje BMW. Esta es una unica versión 330i M Sport y si bien a todos nos encantaría un M340i o un M3 Touring, quizas esta version sea la más equilibrada y la que matiza mejor todo lo que nos gusta de la marca alemana. Yo, paso con el IX, paso con el XM, déjenme un Touring para mí.

¿Por qué?

Primero vamos a partir de la base que es un Serie 3, que a mi gusto sigue siendo el mejor BMW actual; es relativamente compacto al lado de los Serie 5 o Serie 7; no tiene la parrilla tipo "dientes de Bugs Bunny" que tiene el coupé; combina bastante bien las lineas modernas del lenguaje de diseño vigente de BMW con otros elementos más clásicos de la marca; es sobrio pero deportivo en partes iguales y puede ser tan práctico como un SUV pero sin ser enorme ni alto ni exuberante.

En datos más duros, hablamos de un auto de 4,7 metros de largo, con 2,85 metros entre ejes y un maletero de 500 litros. Además viene de la mano con los parachoques M, la parrilla de nuevo diseño con lamas dobles y los focos de diseño revisado, con una firma luminosa que cita a los focos dobles tan tradicionales de la marca. En la parte de atrás solo dos escapes podrían insinuar que se trata de un auto con algo más de potencia que esos que traen los escapes ocultos. Y un detalle importante: no trae ninguna insignia más que la letra M en el portalón. La versión que probé yo, además trae dos elementos que no son propios del modelo que se venderá en Chile, porque no tiene ninguna insignia en el maletero y las llantas de 19" son negras en lugar de bicolor.

Si tu te encontraras con este auto en la calle, a la rápida, no sabrias de que versión se trata e incluso, gracias a los parachoques M y las llantas grandes, podría pasar discretamente como un modelo M Performance o derechamente un M3 Touring. Negro con negro se ve matón: nunca me ha gustado esa combinación de color en carrocería y llantas, pero en este Touring se ve increible porque no es el auto del que lo esperarías.

Por dentro, los puristas tendrán que hacer concesiones

Por dentro hay cambios importantes con respecto al Serie 3 original y son cosas que a los puristas no les van a gustar mucho.

  • El clúster de instrumentos y la pantalla del sistema multimedia son reemplazadas por un nuevo panel panorámico integrado (BMW Live Cockpit Professional). Corresponde a una pantalla de 12,3" para el cuadro de instrumentos y una pantalla de 14,9" para el sistema multimedia, el cual opera con sistema iDrive 8.
  • Como la pantalla del sistema multimedia es más grande y tiene más funciones, los aireadores centrales no tienen integrado el sistema de climatización, ya que esto se opera de manera digital.
  • El selector de la transmisión ahora es un switch, tal como vimos en el BMW IX.

En lo personal, a mí siempre me ha gustado la interfaz digital de BMW por su rapidez, lógica y resolución, pero si hay que reconocer que el cuadro de instrumentos es un tanto sobrecargado. Sería increíble que pusieran un modo "clásico" con algunos elementos que imiten los relojes de antes, pero hoy BMW mira poco al pasado. Con la eliminación del selector de la caja de cambios y los botones del climatizador todo se ve más espacioso, ordenado y minimalista. Por suerte BMW ha dejado el selector iDrive y alguna que otra perilla para que no todo sea 100% táctil. 

El tapiz beige es algo que se echaba de menos. Los interiores bitono en los autos premium ayudan a entregar una sensación de lujo y calidad mayor, puesto que hoy todos los autos son negros en el interior y el negro es un color que disfraza mucho la calidad de los materiales. Como siempre, lo que menos me gusta es el volante, enorme e innecesariamente grueso.

El equipamiento es bastante abundante. Tenemos Head-Up Display a color, climatizador trizona, cargador inalámbrico, Apple CarPlay y Android Auto inalámbrico, techo panorámico y varias asistencias, incluyendo un programa que guarda tu maniobra de estacionamiento y la repite en reversa para salir. Eso sí, no tiene manejo semiautónomo de nivel 2.

¿Ya, pero cómo se maneja?

Este es el tren motriz del 330i:

  • TwinPower Turbo 2.0 (cuatro en línea)
    • Función de Auto Start-Stop y frenado regenerativo. 
  • 258 Hp y 400 Nm
  • 0-100 km/h en 5,8 s
  • Caja automática Steptronic Sport de 8 velocidades. Incluye paddle shifts.
  • Consumo mixto de 15,1 km/l

La respuesta es muy generosa y yo apostaría que el auto es más potente que lo que indica la ficha técnica. Los 400 Nm de torque se sienten casi a lo largo de todo el tacómetro y esa probablemente es la clave de porque este motor de dos litros se siente un poco más explosivo que el de otros autos. Por ejemplo, un rival del 330i Touring aunque con un precio más razonable es el Subaru WRX Sportwagon, con más potencia y más cilindrada (2.4 Turbo) pero menos torque y con una CVT que si bien es probablemente la mejor de todas, nunca será como la Steptronic de BMW.

Lo segundo, es que este modelo es de tracción trasera, lo que lo hace un poco más nervioso y entretenido de conducir cuando se le exige, a pesar de que la cola va tan plantada que no se le mueve un pelo.

Y tercero: el consumo mixto de 15,1 km/l si bien es una cifra de laboratorio, no está lejos de lo que he logrado en varios BMW al tratar de maximizar el consumo. Es un auto que puede ser tan deportivo como tú quieras, con una salida veloz en un semáforo, que puede recuperar muy bien en adelantamientos o en caminos de curva contra curva o que puede ser razonablemente moderado con el combustible. Y es por eso que creo que es una combinación perfecta en la oferta de motores de BMW ya que refleja los dos talentos que tiene la marca: la eficiencia y el performance. Además, para ciudad y carretera, créeme que no necesitas más potencia.

¿Tiene cosas negativas?

Por supuesto. El volante innecesariamente grueso es una de esas, porque le resta tacto al tren delantero. Lo segundo es que las plazas traseras siguen siendo generosas para cuatro y no para cinco ocupantes, salvo que el del medio sea un niño muy pequeño. Lo tercero, su enorme precio de casi 60 millones de pesos lo hace una compra más pasional que racional, cuando en realidad debería ser todo lo contrario. Por 60 millones de pesos, lamentablemente, la gran mayoría de los clientes de BMW le pasarán por alto y se irán derecho a donde está el X3 o el X4, sin contar que se trata de un 330i solamente y no de un M Performance.

Aun así, sigue siendo al menos para mí, un BMW ideal. El mío, eso sí, en Thundernight Metallic por favor, ¿se puede?

Jorge Beher recomienda