Como todos los años, casi en el último trimestre, BMW realiza su ya tradicional Track Day para prensa y clientes de la marca, donde se pueden probar algunos de los modelos de las líneas BMW M y M Performance. Este año también sumaron la presencia de MINI, con los Cooper S y Countryman S.
Pero hay algo que no cambia jamás: la develación de algún nuevo modelo importante para la marca, como es en este caso, el estreno del poderoso BMW M5 de la generación G90.
Un peso pesado entre los supersedanes europeos
No vamos a obviar el tema. Con un peso de casi 2.5 toneladas, es 500 kilos más pesado que su antecesor. Esto lo hace tan pesado como algunos SUV americanos. Sin embargo, dada su altísima potencia, es el primer M5 en bajar su relación peso/potencia, incluso por debajo del M5 de quinta generación, que es justamente lo que explica (por quienes lo han manejado, como nuestro editor Marcelo Palomino) por qué se siente más liviano que el resto al manejar. Por supuesto, el peso no desaparece, solo es enmascarado por la gran potencia del sistema motriz y el gran desarrollo de chasis.
Honrando el espíritu motorsport que siempre ha llevado embebido el M5, se tomó como base el sistema que usa BMW en el WEC y en el IMSA, apoyado por el V8 que también impulsa al BMW XM. Hablamos de un V8 4.4 Twin Turbo de 585 Hp y 750 Nm, apoyado por un propulsor eléctrico de 197 Hp y 279 Nm, que además cuenta con una premarcha para multiplicar el torque a 450 Nm en las salidas. Es esta combinación la que da 727 Hp y 1.000 Nm de torque, potencia enviada a una transmisión M Steptronic de ocho velocidades y el sistema de tracción AWD M xDrive con prioridad en la tracción trasera, eje trasero direccional y diferencial activo M, entre otros trucos, como los frenos carbono-cerámicos opcionales, los amortiguadores adaptativos y barras estabilizadoras fijas.
¿Los resultados? Un 0-100 en 3,5 segundos, 200 km/h en 10,9 segundos y una velocidad punta de 250 km/h, desbloqueable a 305 km/h con un paquete especial. Y todo esto, con una autonomía de 69 kilómetros en modo 100% eléctrico, cortesía de una batería de 14,8 kWh.
Diseño más muscular
El M5 siempre ha sido ante todo, un sedán sobrio con detalles que dejan entrever "el veneno" con el que fue picado. Pero conforme pasan las nuevas generaciones, el auto se ha vuelto más agresivo y evidente. Tenemos la gruesa máscara frontal con el logo M5 en color negro y el contorno iluminado (Iconic Glow), un gran parachoques con una toma de aire completamente abierta, faldones, un difusor trasero con cuatro salidas de escape y un ensanche tras las puertas traseras que no queda al ras de la carrocería, un detalle hecho a propósito para poder marcar más la figura muscular del auto. También tenemos llantas de 20 y 21 pulgadas, cálipers rojos y detalles de fibra de carbono.
El tamaño también ha crecido un poco. Aumento de 4,98 a 5,09 metros (+113 mm) en el largo, en el ancho pasó de 1,90 a 1,97 metros (+63 mm), y en la distancia entre ejes de 2,98 a 3,00 metros (+24 mm).
Interior tan ejecutivo como deportivo
El M5 toma como base el arsenal tecnológico del Serie 5 y lo acompaña con el tratamiento M. Esto significa que veremos un volante deportivo con accesos directos a los settings personalizados de manejo, pedales metalizados, opción de acabados en aluminio o fibra de carbono, exquisitas butacas climatizadas con tapicería en cuero Merino con color a elección y dos enormes pantallas que forman parte del BMW Curved Display, operando con el sistema operativo 8.5 de la marca. Hay climatización de cuatro zonas, sistema de audio Bowers & Wilkins, funciones interactivas en el Interaction Bar que envuelve el habitáculo, head-up display opcional, techo panorámico y los controles para todo lo que tiene que ver con los modos de manejo, gestión energética y tracción por medio del comando iDrive central con dial de cristal.
Como opcionales, según el mercado, podremos contar con un techo de Alcantara, asientos ventilados, volante calefaccionado, entre otros. Por supuesto que también cuenta con asistencias a la conducción, incluyendo frenado autónomo, manejo semiautónomo de nivel 2 con dirección evasiva y hasta asistente de estacionamiento.
El precio declarado para el BMW M5 en Chile es de $169.000.000
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