El Kicks de segunda generación generó un problema para Nissan Latinoamérica, la división que engloba 39 mercados regionales y que representa el 15% de las ventas de la marca a nivel mundial. Y es que al ser desarrollado pensando prioritariamente en el mercado estadounidense, el modelo creció en tamaño y elevó su estándar de equipamiento, siendo sustantivamente más caro que el Kicks original lanzado en Chile en 2016.
Su posicionamiento en Chile refleja lo que le ha pasado en toda la región. De ser un modelo de acceso con precios por debajo de los 20 millones de pesos y representar 1 de cada 4 Nissan vendidos en el país, el nuevo Kicks llegó a Chile por encima de los 25 millones, terreno que hasta no hace mucho pertenecía al Qashqai.
Por lo mismo, Nissan necesitaba un nuevo SUV de entrada. En algunos mercados como México se echó mano al Magnite, un mini SUV fabricado en India, pero que por razones industriales y comerciales no se ha lanzado (ni se va a lanzar) en Sudamérica.
Para nuestra región se estaba esperando al Kait, un modelo que fabricará en la planta de Resende (Río de Janeiro) y que acaba de develarse en Sao Paulo. Iniciará su comercialización en Brasil este mes de diciembre y se espera que llegue a los mercados sudamericanos a partir del segundo trimestre del año.
Debido al cambio del modelo de negocio de Nissan en Chile, que volverá a ser comercializado por un importador (Astara) a partir del mes de abril (si todo sigue su curso), nadie quiso confirmar una fecha exacta, pero de que el Kait llegará en 2026, lo hará con certeza.
¿Y qué es el Kait?
Pues, básicamente es un reemplazo del Kicks Play, el nombre que se le dio al viejo Kicks para mantenerlo en las vitrinas tras la llegada del nuevo Kicks. Obviamente que la marca habla de un modelo totalmente nuevo, pero nosotros podríamos definirlo como una actualización profunda del modelo develado en 2014 y puesto a la venta una década atrás.
La plataforma es la misma que la del Kicks (llamada V), y el motor, pese a que no fue anunciado, es “un tren motriz probado y confiable”. Todo indica que tendremos el conocido 1.6 litros de cuatro cilindros (Serie HR16DE) que eroga 118 Hp y 140 Nm de torque, acoplado a una caja automática CVT.
En Brasil se ha hablado mucho de que el Kait podría recibir más adelante el motor de tres cilindros 1.0 Turbo que se estrenara en el Renault Kardian, y que genera 125 Hp y 220 Nm, y que se gestiona por una caja automática de doble embrague.
“El nuevo Nissan KAIT llega para ocupar un lugar central en el portafolios de Nissan, así como en la preferencia de los clientes que buscan un SUV moderno, seguro y con la confiablidad de nuestra marca”, dice Nissan en su comunicado”.
Las dimensiones del Kait son prácticamente las mismas del viejo Kicks: 4.30 m de largo, 1.76 m de ancho, una distancia entre ejes de 2.62 m y una capacidad de maletero de 432 litros. Si lo ponemos en competencia, sería un rival de modelos como el Volkswagen T-Cross o un Chevrolet Tracker, ambos fabricados en Brasil. Pero por precio, Nissan pretende atacar un poco más abajo.
Independiente de si gusta o no, el diseño es totalmente nuevo y denota que estamos frente a un SUV de líneas modernas, depuradas y minimalistas, con elementos tomados de la industria china y otros del segmento de autos electrificados.
Los faros delanteros están divididos, con las luces principales unidas visualmente a través de una franja oscurecida. Tiene un capó elevado y cuenta con una amplia entrada de aire en la parte inferior.
La silueta nos recuerda demasiado al Kicks de primera generación, incluyendo el corte del pilar trasero que simula el efecto de techo flotante, mientras que en la zaga, las luces traseras están interconectadas pero son más estrechas que en el Kicks Play. Como novedad, la palabra Kait domina sobre el portalón trasero.
Del interior no hay fotos oficiales, pero sí algunas espías, que muestran un diseño muy similar al Kicks Play, con la pantalla central empotrada en el tablero, conectividad inalámbrica a Apple CarPlay y Android Auto, climatizador con mandos físicos bajo la pantalla, un clúster mixto con pantalla digital, botón de encendido en la consola y un volante con muchos botones.
El Nissan KAIT es el segundo SUV anunciado como parte de una inversión de $540 millones de dólares que la compañía está realizando para Brasil. Esta inversión permitió actualizar el Complejo Industrial de Resende para producir la segunda generación del Kicks y, de paso, lanzar este nuevo Kait, que según la marca será exportado a más de 20 países.
Sobre las especificaciones finales poco sabemos. La marca las liberará poco antes de ponerlo a la venta en cada mercado. Habrá que ver la ficha final cuando se lance en Brasil.
