La aparición de marcas y submarcas vinculadas a los principales grupos automotores chinos no es algo nuevo. Lo vimos hace unos 15 años atrás, y se vuelve a ver en esta década. Great Wall Motors ha sido uno de los grupos principales en liderar esta tendencia, cuando hace unos 10 años lanzó Haval, que por entonces era el nombre del SUV más exitoso en China, y ha seguido con otros nombres como TANK, WEY y ORA.
Poer, Haval, TANK y ORA ya son nombres de exportación y están presentes en muchos de los mercados gloables de Great Wall, incluyendo a Chile. Pero de WEY poco se ha sabido, quizás por su posicionamiento de precio, que la hacen poco atractiva en mercados emergentes como el nuestro. Desde Inchcape nos dicen que WEY está en carpeta, pero no a corto plazo. No antes de 2026, podríamos decir.
De WEY supimos por primera en 2017, cuando se estrenó globalmente en el Salón de Shanghai y meses más tarde en el de Frankfurt, en ambas ocasiones con el conceptual XEV. Great Wall la definió como una marca de lujo, con diseño vanguardista y tecnologías de futuro. Vale decir que su nombre proviene del apellido del fundador de Great Wall, Jack Wey.
Dos años después, WEY ya contaba en China con tres SUV, los VV5, VV6 y VV7, todos con motores gasolineros turbo y sistemas híbridos, y se aproximaba a Europa con dos conceptuales eléctricos. el WEY-S y WEY-X, estrenados en el Salón de Frankfurt de 2019.
WEY Coffee 1 o 05.
En algún momento posterior, Great Wall Motors decidió que su marca 100% eléctrica sería la nueva ORA, por lo que los desarrollo de WEY se centraron en la tecnología híbrida enchufable. Y así nació el Coffee 01, un SUV estrenado en el IAA de Munich 2021, y que se convertiría en su primer modelo comercializado en Europa.
Vale decir que aquel no fue su nombre definitivo (se lanzó oficialmente como WEY 05), sino que tomó la denominación de la nueva plataforma inteligente de conectividad y conducción autonóma desarrollada por GWM, que incluye tecnologías de vanguardia como 5G, Autopilot y V2X.
Se trata de un SUV de gran tamaño, con 4,87 metros de largo, con un tren motriz híbrido enchufable compuesto por un motor gasolinero de cuatro cilindros y dos litros, que envía al eje delantero 204 Hp de potencia, y que está asociado a dos motores eléctricos. El sistema total ofrece una potencia de 350 kW (476 Hp) y muy buenos 847 Nm de torque, todo ello gestionado por una caja automática de doble embrague y nueve marchas. La batería instalada en el piso tiene 42 kWh de capacidad, para 150 kilómetros en modo EV de autonomía.
WEY 03.
Meses más tarde, WEY lanzó en Europa el 03, un SUV de 4,66 metros de largo, equipado con una batería de 34 kWh para 136 km de autonomía, y que alimenta un sistema híbrido con un motor de combustión y otros dos eléctricos, para ofrecer 435 Hp y 685 Nm de torque.
Si bien su introducción en Europa parecía acertada, las bajas ventas conseguidas, sumado a los nuevos impuestos aplicados por la Unión Europa a los vehículos electrificados chinos, ha obligado a GWM a cerrar sus operaciones en Europa, aunque desde la marca indican que es sólo un retiro temporal para adaptar la estrategia.
Los nuevos modelos
La última adición a la gama de WEY llegó este año bajo el nombre Lanshan, que podría traducirse como Blue Mountain o Montaña Azul. Se trata de un SUV de lujo que arriba en formato PHEV, equipando las últimas tecnologías desarrollada por la marca, incluyendo las nuevas actualizaciones del sistema Coffee Pilot Ultra (OS 3), con nuevas capacidades de conectividad y conducción autónoma.
El Wey Blue Mountain incluye en su interior dos pantallas principales, una central y una para el pasajero, que se pueden controla con mandos por voz o gestuales. También hay un Head-up display de realidad aumentada para el conductor, que muestra información como los vehículos circundantes y las funciones de conducción autónoma. El diseño general es minimalista y con una alta sensación de lujo interior.
Al ser un SUV grande de 5,15 metros de largo y 3.05 metros entre ejes, cuenta con tres corridas de asientos en disposición 2+2+2. El apoyabrazos central tiene un refrigerador que puede contener seis botellas de agua. En la parte posterior de la consola central hay una pantalla digital y un panel de control para los ocupantes de la segunda fila. También ofrece una pantalla grande plegable para el entretenimiento.
Pero vamos a lo principal: su sistema de conducción inteligente, la que se realiza a través de un conjunto de 27 sensores, que incluyen una unidad Lidar montada en el techo, además de cámaras de alta definición, radar ultrasónico y radar de longitud de onda milimétrica.
En Baoding, la ciudad sede de Great Wall Motors, pudimos corroborar en directo cómo funciona su sistema de conducción autónoma nivel 2.5, que en esencia, permite que el auto se controle solo sin necesidad de intervención del conductor en ninguna de sus operaciones, aunque deba ir sentado en el asiento con la vista hacia adelante.
El sistema funciona tanto en ciudad como en carretera, hasta 130 km/h de velocidad. Trazando una ruta en el sistema, el auto toma el control absoluto y puede adelantar otro vehículos, cambiarse de carril (señalizando previamente), doblar en una esquina, frenar y anticipar tráfico. Es realmente inteligente.
Mecánicamente, el Lanshan cuenta con el nuevo sistema híbrido Hi4 de GWM. Consta de un motor de gasolina 1.5 Turbo con una potencia máxima de 170 Hp, asociado a un motor eléctrico montado en la parte trasera con 295 Hp de potencia y 410 Nm de par, mientras que un motor delantero más pequeño proporciona 175 Hp y 300 Nm de par. Las cifras combinadas del sistema son 510 caballos y 933 Nm, una brutalidad. Los motores eléctricos admiten los modos eléctrico puro, prioridad eléctrica pura e híbrido inteligente.
La energía proviene de una batería CATL de 44,5 kWh, para una autonomía totalmente eléctrica de 180 km (WLTC), y una autonomía combinada de más de 1.200 km (WLTC).
¿Podríamos verlo en Chile? Por ahora no está en los planes.
