Son contados los autos eléctricos que se venden en Chile; contados los modelos y contadas las unidades. Incluso, algunos como el Mitsubishi i-MiEV, pionero de todos ellos, ya no se comercializa. Con ello nos queda el BMW i3, el Hyundai Ioniq EV y el próximo a lanzarse Nissan Leaf de nueva generación. Los demás son modelos electrificados, es decir, híbridos y aquí contamos autos que van desde el Toyota Prius hasta el Karma Revero.
En común, tienen un precio muy elevado y una autonomía que no es la que nos gustaría. El i-MiEV en su tiempo tenía 160 kilómetros y en el sitio para el que escribía antes, fui de los primeros en atestiguar su performance, en un desafío Santiago-Viña del Mar. Fue una experiencia tragicómica y llegamos con el último aliento de esas pobres baterías, a una velocidad que podríamos describir como triste.
Los modelos más contemporáneos, como el Leaf de primera generación y el Ioniq de Hyundai estiman rangos máximos de entre 250 a 280 kilómetros en el papel, bastante más. El nuevo Leaf, tiene un rango combinado de 270 kilómetros, con una máxima teórica de 390 en ciclo urbano. Y el BMW i3 que probamos el año pasado, prometía entre 250 y 300 kilómetros, cuando en realidad solo alcanzamos cerca de 185 en una sola carga.
Como pueden ver, son cifras que son perfectas para un uso urbano, donde gracias al tráfico, no gastarás mucho (aquí es al revés de los autos a bencina, más lento, gastas menos). Pero si quieres salir fuera de la ciudad, tienes que confiar en que llegarás a un lugar donde puedas cargarlo, algo que toma bastante más tiempo de lo que lleva cargar un estanque de gasolina -y mucho más si no es en una electrolinera.
Esta semana, Dongfeng fue la primera marca de China en apostar por la comercialización formal de un modelo eléctrico de pasajeros. Este auto es el S50 EV, el cual hizo una tímida introducción en marzo (puedes leer sobre dicha actividad, en esta nota), todavía en fase de homologación y aun con el apellido Joyear, que es de la familia a la que representa. La idea era ofrecer este modelo a flotas de taxistas y colectiveros, pero la verdad de las cosas es que el gobierno no ha decidido que tipo de subvención brindará. Es el cuento de nunca acabar, donde la marca y el país se tiran la pelota mutuamente entre quienes son los que deben bajar el precio de estos autos. Richard Valenzuela, Gerente Comercial de CIDEF señaló que eran cerca de ocho millones y medio lo que estaba en negociación, los que serían descontados de los 22 a 23 millones de pesos que costará este modelo.
Más de 400 kilometros de autonomía puede lograr el Dongfeng S50 EV
Sobre el S50 EV
Recordando un poco sus especificaciones, el S50 EV es la versión eléctrica del S50 que ya se vende en Chile, basado en la plataforma del Nissan Sylphy (Sentra), tecnología a la que tienen acceso bajo acuerdos de fabricación en China con los japoneses. Sus dimensiones son de 4.705 mm de largo, 1.790 mm de ancho y 1.540 mm de alto, considerando 2.700 mm entre ejes y un maletero de 500 litros. Las baterías van por debajo del auto y si te agachas podrás ver como sobresalen discretamente del chasis.
Su propulsor, es una unidad eléctrica de 90 kW, el que eroga 121 Hp y 280 Nm de torque. Alcanza los 100 km/h en 11 segundos y de ahí hasta los 150 km/h, limitados como suele ser en la mayoría de estos autos. Su autonomía, que es el argumento de compra principal de este auto (y la justificación de nuestro prólogo) es de 410 kms en ciclo mixto, aunque si no pasas de 60 km/h, esta cifra podría aumentar a los 500 kms; impactantes para nosotros, pero nada nuevo en China, que se sabe es de donde provendrá la masificación eléctrica.
Su equipamiento es completo, pero para nada impresionante, incluyendo alzavidrios y espejos eléctricos, aire acondicionado, sistema multimedia con pantalla táctil de 8", Bluetooth y Mirrorlink, pantalla de supervisión de 7" entre los marcadores, sunroof, comandos al volante, Smart Key, sensor y cámara de retroceso, ESP, Hill Holder, freno de estacionamiento eléctrico, monitor de la presión de los neumáticos, ISOFIX y asientos de cuero sintético. De todo esto, el sistema multimedia no tiene soporte para Apple CarPlay o Android Auto, esperable en un auto chino, y solo cuenta con dos airbags, en un auto de más de 20 millones de pesos.
Logramos manejar al S50 EV por las calles aledañas al evento (una vuelta a la manzana) y el auto se muestra suave en su aceleración, no es agresivo ni siquiera en el modo Sport de la transmisión, aunque si con decisión. La insonorización está bien lograda de igual modo, no así el tacto de la dirección, algo sintético. Lo que menos nos gustó fueron los asientos, muy duros en todas las plazas.
Y hay otro detalle que no hemos hablado, que es el de sus cuestionables acentos en color azul en el parachoques, máscara frontal y en las llantas. Sabemos que el azul es el color de la electromovilidad y gracias a BMW con sus i3 e i8, estos insertos han sido copiados por muchos otros fabricantes, una idea que no le aporta mucho estilo a modelos que no tengan el intrincado y futurista diseño de los alemanes.
¿Ventas? Habrá que esperar a que se tienten los flotistas, en especial con la suculenta cifra de autonomía, que puede marcar una diferencia notable frente a sus rivales, los que claro, son muchísimo más sofisticados. Una por otra.
